SIETE FORMAS PARA MEJORAR TU VIDA SEXUAL.
¿Delirante? ¿Apasionado? ¿Inolvidable? No importa como lo imagines, puedes lograrlo.
¿Delirante? ¿Apasionado? ¿Inolvidable? No importa como lo imagines, puedes lograrlo.
- Cambia
el ritmo: Si
quieres disfrutar junto a tu pareja, busca otros horizontes de placer,
besa más lento o más rápido, pero distinto a como lo haces, prueben
acariciarse y tómense su tiempo.
- Haz
ejercicio: El
sexo es una actividad emocional y física que resulta mucho más eficiente y
satisfactoria cuando se tiene una buena condición. Realizar ejercicio
físico moderado, unas tres veces por semana a un ritmo constante por 20 a
30 minutos, te proporcionará la soltura necesaria para preocuparte sólo de
tu satisfacción y la de tu pareja, y no de cuán demandante puede resultar
equis encuentro. Puedes caminar enérgicamente, andar en bicicleta, bailar,
practicar algún deporte o incluso subir escaleras. Recuerda
estirarte antes y después.
- Platica
con el doctor: Hay
problemas médicos que afectan la vida sexual: desde una gripa hasta un
cáncer, pasando por diversos grados de depresión o problemas digestivos. Y
también algunos medicamentos: para la hipertensión o la diabetes, por
ejemplo. No te preocupes: tu doctor (o doctora) también tiene su
corazoncito, y sabrá entenderte... o recomendarte algo que favorezca, en
buena medida, tu diversión.
- Toma
vitamina B: Alimentan
las células nerviosas y te ayudan a resistir el estrés y la fatiga.
- Deléitate:
La
sensualidad no sólo se disfruta en la cama. Para desarrollar la capacidad
de disfrutar con el sexo resulta muy útil aprender a deleitarse con todo y
a cada momento: saborear cada sorbo de jugo de naranja en la mañana; sentir
las diferentes texturas de cada prenda que te pones; complacerte con cada
uno de los colores del amanecer...
- Aprende
a respirar: Las
tradiciones de mayor sabiduría sexual coinciden en resaltar la importancia
de la respiración para manejar las diversas calidades del encuentro
erótico: el Tantra y el Tao del Amor utilizan la respiración consciente
para prolongar la excitación y llegar a estados de éxtasis trascendental.
Si aprendes a respirar relajadamente podrás mantener el periodo de meseta
por más tiempo y acumular energía sexual, de modo que te permita un
orgasmo más extenso e intenso. Un ejercicio básico es acostarse boca
arriba y poner las manos en el vientre, para sentir cómo suben y bajan con
cada inhalación. Más adelante, practicar este tipo de respiración durante
el sexo.
- Decide
tú: Aprende
a decir que no. Este es otro de los grandes secretos del placer sexual: la
asertividad. Para algunas personas decir lo que no quieren puede ser tanto
o más difícil que comunicar lo que desean. Si en la intimidad se te
dificulta expresar lo que no deseas sin herir a la otra persona, puedes
empezar sutilmente diciendo “me encantaría que...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario