THE NEWS DELIRICS.


Para que vean que los poderosos de la entrepierna también sufren y tienen problemas, les mostramos lo que sucede en Uganda. Así es, los inocentes y superdotados ugandeses sufren porque los preservativos son muy pequeños para el tamaño de sus rebosantes miembros. Honestamente suena algo humorístico hasta cierto punto, pero lo cierto es que los índices actuales de contagio por VIH/SIDA son altos.

Lo legisladores de Uganda se han visto presionados por solucionar la situación lo más pronto posible, uno de los miembros del Comité Parlamentario para VIH/SIDA; el Diputado Tom Aza fue muy insistente en que la existencia de un tamaño único para todos no es lo adecuado, tomando en cuenta la última gira por las zonas más afectadas por el virus, en donde la mayoría de los hombres tienen penes de tamaño considerable. Algunos de los puntos que el legislador dijo durante sus declaraciones a la televisora ugandés NTV fueron:

“Los  hombres  que  tienen  órganos  sexuales  grandes  deberían  recibir  preservativos  más  grandes”.
 “Cuando se trata  de  acción,  cuando  tienen  actividad  sexual, es  natural  que  explote  a  causa  de  la presión”.

Otros de los miembros del mismo Comité Parlamentario, el Diputado Merard Bitekyerezo y su homóloga Sarah Netalisile declararon para la misma emisora:
“Algunos jóvenes se quejan de que los condones que reciben son muy cortos y sus órganos no caben en ellos”.
“El problema del tamaño estaba exponiendo a nuestros hombres y mujeres, y a todos los que usan preservativos, a contraer VIH y SIDA”.
Tristemente los índices de infectados por el virus del VIH en Uganda han aumentado de una forma considerable y alarmante. Todos los años causa la muerte de 80,000 personas y cerca de 1,8 millones de personas en Uganda viven con el virus y 1 millón de niños están huérfanos porque sus padres murieron de sida.

Tener miembros de gran tamaño es un problema para los hombres en Uganda.
Esperemos una solución positiva del parlamento.


Colaboración de:
Soy Homosensual.

Cuando Calle…

Cuando mis letras callen y ya no escriba para ti
en lo absoluto significa que deje de quererte.

Simplemente comprendo que es momento
de dejarte, dejarte libre, a paso abierto,
sin tu memoria en la mía, sin tus recuerdos,
sin el flagelo de tu vacío en mi cama
y la caricia de tu beso.

Es simple, solo comprendo que es más duro
el silencio de ti que el de la lluvia sobre mi techo,
que es menos doloroso que la soledad
que yo por ti me he creado.

Cuando mis letras no vuelvan a ser para ti
no es porque haya dejado de quererte,
simplemente es que ya entendí que yo a ti
he dejado de importarte.
Dany R.

Ahora ya solo es eso…

Y así, poco a poco se fueron las ilusiones que

traen consigo los amores.

Ahora los días nublados y las tardes lluviosas

son solo la hermosa oportunidad para que baile

como cuando era niño bajo la lluvia.

Ahora la libertad es propia y que bueno ya no

es compartida.

Ahora las borracheras son por batallas vencidas

y que bueno ya no por ilusiones y promesas destruidas.

El frio ya solo es eso y dejó de ser pretexto

para esperar el calor de tu mano con la mía,

al vexo del paso de uno o dos otoños

y la soledad del ocaso.

Lejos o cerca, pero más lejos de mí

que cerca de donde te quiero,

es ahí donde debemos estar.

En distancia, en tiempo

o la falta de anhelo.

No digo que sea incapaz de poder amar.
Solo aprendí que el amor no es un producto
ya hecho, que un te amo, no es un te quiero. 
Todo esto es algo más que todo eso.
Es el conocimiento de ti, tus celos y tu cuerpo.

Dany R.

Él Amor.
Me preocupa la gente que dice que anda buscando el amor, como si el amor ya estuviera por ahí listo y terminado. Como si existiera un amor enlatado, un producto diseñado que eliges en algún escaparate. Se han creído el cuento del amor prefabricado que nos venden en las películas de domingo en la noche o que nos cantan en la radio. Uno no busca el amor, uno lo construye...

La Felicidad.
Me preocupa la gente que dice que anda buscando la felicidad. Como si la felicidad ya estuviera por allí lista para ser bebida, como una poción mágica que nos cambiará el alma.
Como si la felicidad fuera algo definitivo que aguarda al final de toda historia…
La felicidad, como el amor, es una construcción cotidiana. Nadie vive feliz para siempre, nadie que esté vivo puede hacerlo. Nos han vendido la nostalgia del paraíso. La merecida retribución por nuestros esfuerzos, la receta definitiva que nos cerrará los ojos ante el dolor de la vida. Así se hacen las religiones, los libros de autosuperación y las películas de Hollywood.

Nunca seremos felices.

Todo cansa, incluso la alegría, todo siempre está incompleto, roto, sucio, deforme; pero eso nos mueve a seguir caminando, a seguir buscando.

La felicidad no está en ninguna parte esperándonos…  
La felicidad hay que inventársela de nuevo cada día.

El Sentido de La Vida.
Me preocupa la gente que dice que anda buscando el sentido de la vida. Como si la vida tuviera sentido; y como si ese sentido ya estuviera listo en algún lugar esperando a ser leído como un libro en el escaparate de alguna biblioteca. Nos hemos acostumbrado a que  nos den el significado de todas las cosas, a que sean otros los que interpreten y construyan sentido para que nos informen de él.

Nos lo han repetido por años para que no lo olvidemos. Sólo nos falta encontrar el sentido final de la vida y quedaremos contentos. En alguna parte debe estar, alguien lo debe saber. Algún religioso, o gurú, o  líder de algún tipo: científico, financiero, deportivo, lo que sea.

La vida no tiene sentido, o por lo menos no tiene un solo “sentido”. Por ello nadie nos puede explicar nuestra vida. Por ello podemos (y debemos) darle el sentido que queramos. Nadie puede interpretar lo que vivimos, nadie pude decirnos quienes somos. Nadie tiene las respuestas porque las respuestas no existen. Las respuestas no se buscan, se construyen.

…No podemos descubrir qué somos porque no somos algo ya hecho, sólo podemos construirnos. No nos define un gesto único, un solo momento, cada instante que vivimos es un ladrillo que vamos sumando a lo que hacemos de nosotros mismos.

Otras Cosas…

El mundo está vació, no hay nada en él para nosotros. Todo tenemos que hacerlo, pero creo que eso es lo maravilloso.

El mundo es una página en blanco para escribir historias, es barro para construir, un escenario para improvisar nuestra obra, un lienzo para pintarnos a nosotros mismos.

Los materiales podemos hallarlos en los lugares más insospechados, la materia que todo lo une es el tiempo. No lo desperdicies, deja de buscar respuestas prefabricadas,…puedes inventarte la felicidad con las luces de la mañana, el amor con la sonrisa de un desconocido, el sentido de la vida en el fondo de un verso oscuro. Las posibilidades son infinitas, lo único finito es el número de días que tenemos para hacerlo. Aprovecha el día. Llegará el momento en que tendrás que leer tu propia historia, ese es el único final que te espera.

Carlos Arturo García Bonilla-