lunes, 31 de marzo de 2014

Y siempre hace frio, estés con alguien o no, pero siempre hace frio.
A veces es más intenso después de que alguien estuvo contigo y ahora no.


-Dany R.-


sábado, 22 de marzo de 2014

Luces y Noches de Primavera.



La noche ocurre sin nubes,
bajo las notas de un piano
que desentona con la alegría.

Solo vislumbro tinta regada,
esparcida por el firmamento,
en momentos se notan destellos,
destellos de luz, destellos de esperanza.

Parpadeantes luces de fuego bendito,
que florecen con la
llama de mi propia primavera,
y el olvido tuyo y mío.

Aroma a tu piel, desprendido
del silencio y calor de tu alma.
Sin sacrificios ni tormentas,
solo aroma de ti que revoca
tu imagen después del orgullo.

Un espacio casi vacío,
con ahora aroma a soledad,
con luces que alumbran mi camino.
Voces mudas que gritan tu nombre.
               
Y así dentro de mí,
luces y noches de primavera
ocurren todos los días,
recordándome no rendirme,
retomar el vuelo, sonreír
y nunca olvidarte,
pero no por siempre añorarte,
siempre vuelve el día
y así será para ti y para mí.



-Dany Ramírez.-


martes, 18 de marzo de 2014

Poema  núm. XVII

Te amo sin saber cómo, ni cuándo, ni de dónde,
te amo directamente sin problemas ni orgullo:
así te amo porque no sé amar de otra manera,
sino así de este modo en que no soy ni eres,
tan cerca que tu mano sobre mi pecho es mía,
tan cerca que se cierran tus ojos con mi sueño.

-Pablo Neruda.-



Photo by:   Armin Alvarez.

Edit:  Dany Ramirez.


lunes, 10 de marzo de 2014

“Vivir o Tratar de Sobrevivir”

Sean los sueños que tengas, sea el lugar a donde debas irte para lograr tus metas, la vida siempre se encarga de regresarte a tu origen, al lugar donde naciste, te retorna sin duda alguna a tu inocencia.
A veces es duro entenderlo, a veces es doloroso. Muchas ocasiones es tarde cuando lo comprendes;  tarde pero con la certeza de que puedes transformarlo.
A veces esperamos a que muchos de los que estaban y nos amaban se hayan ido a un viaje que no tiene retorno, y no es hasta ese momento en el que te das cuenta de que su amor era incondicional.

En muchas otras circunstancias nos negamos a verlo y decidimos darle la vuelta. La vida siempre nos rememora que debemos de hacer la paz con aquello que nos lastimo y lastimamos.
Sea lo que sea, haya sido como haya sido, nuestro papel en esas dolorosas situaciones juega como víctimas y victimarios, cómplices y secreto, causa y consecuencia.

Hay dos cosas que no pueden ser ocultadas: El sol y la verdad.
De una o de otra forma, la verdad sale a relucir. No podemos ocultar nuestra verdad.
Nuestra verdad es nuestra identidad, son nuestros hechos y sucesos, nuestro pasado con sus lágrimas y sonrisas, con sus experiencias superadas y heridas aún abiertas.
No podemos tratar de ser otro, no puedo ser como el chico guapo que a todos les gusta, no puedo ser el hijo de un multimillonario que tiene un futuro seguro, no puedo ser el motivador de la radio a quien yo admiro.
Y no puedo ser  porque el mundo ya tuvo a Gandhi, ya tuvo un Van Gogh, ya tiene a Esquinca, tiene a ese chico guapo y a un “Junior”. El mundo ya tiene a ellos, lo único que le hace falta al mundo es alguien como yo. Ese es el secreto.
La pregunta que muchos se hacen y que muchos ni siquiera quieren hacerse a sí mismos es:
¿Quién soy yo?
Esta misma pregunta te lleva a una que la acompaña de la mano:
¿Cuál es el motivo por el cual este aquí?
A más de uno le ha decepcionado la respuesta.

-Me he hecho  la  misma pregunta alguna vez, me decepcione y decidí transformar la respuesta.
Tiempo  después  me olvide un poco de lo  que realmente me importa y después me volví a hacer la misma pregunta. Nuevamente me volvió a doler. Comprendí entonces  que  la respuesta depende de quienes estamos dispuestos a ser.-


¿Entonces, quienes estamos dispuestos a ser?
¿Ser la imitación de alguien?, ¿ser lo que allá afuera quieren de ti?, ¿tratar de ser una linda apariencia, rogando la admiración, aplausos y halagos para una imagen que nunca ha sido más que eso, una imagen?

O podemos elegir ser quienes ya somos, podemos elegir ser nuestros anhelos y nuestros sueños, podemos elegir amar y querer a nuestra manera y no como la que nos venden en las películas que pasan los domingos, (como diría Bucay) podemos elegir existir y no solo aparentar.
La primera es interesante, la primera puedo definirla como vida, la segunda puedo decir que es “tratar de sobrevivir”.


Todo esto te lleva regresar a tu inocencia, a esto te lleva regresar a tu interior. Es doloroso toparse con ello. Pero es ahí donde debemos decidir seguir tratando de sobrevivir, o ser lo que el universo necesita y comenzar a vivir.



-Dany Ramirez.-